El desayuno es el alimento más importante, ya que es el principal aporte calórico del día. En la mañana, el cuerpo asimila mejor el consumo de alimentos porque es cuando hay más tiempo para que el metabolismo trabaje a un buen ritmo y queme mayor cantidad de calorías ya que estamos más activos. Los estudios han concluido que las personas que toman desayuno antes de ir al trabajo están más animadas, con más energía y tranquilidad durante el día.
Desde el punto de vista médico, no hay duda que es preciso distribuir la alimentación en forma equilibrada a lo largo del día, porque las sobrecargas calóricas multiplican los riesgos de desencadenar en alguna enfermedad. Por ejemplo, es de conocimiento, que el no desayunar altera las concentraciones de grasas y la sensibilidad de la insulina “post-pandrial”. En varias investigaciones se ha demostrado que las personas que no desayunan tienen 4.5 veces más riesgo de padecer de obesidad.
Por otro lado, la cafeína es la sustancia psicoactiva de mayor consumo en el desayuno en todo el mundo. Está claramente documentado que la cafeína es un estimulante del sistema nervioso autónomo, que puede quitar la somnolencia y restaurar el nivel de alerta. Pero, cuidado; la cafeína puede provocar insomnio, nerviosismo, excitación, cara rojiza, aumento de diuresis y problemas gastrointestinales. En algunas personas los síntomas aparecen cuando consumen cantidades muy pequeñas como 250 mg diarios.
Más allá de un gramo al día puede producir contracciones musculares involuntarias, arritmias cardiacas y agitaciones psicomotrices; y en exceso de esta cantidad, pudiera producir síntomas similares a pánico y ansiedad generalizada. Por esto se recomienda que el consumo de cafeína sea la menor posible.
Recuerda, la omisión del desayuno o un desayuno deficiente genera desequilibrios en los hábitos alimenticios y en el estado nutricional. Para mantener tu metabolismo a toda velocidad se recomienda que no saltes tus comidas, especialmente tu desayuno. Además, la ingesta de pequeñas comidas durante el día ayudará a mantener tu cuerpo encendido y a paso fijo.
Para información adicional habla con tu médico primario, y no olvides consultar con él (ella) antes de comenzar cualquier programa físico o tratamiento.
Fuente Mundo MAPFRE